La semana pasada, yo mismo denunciaba a la piscifactoría de Pescanova sita en Lago por un escape de gasoil producido al romperse una de las tuberías perimetrales de la empresa y verter los productos directamente al mar. la cosa empezaba a las 11:00 h de la mañana y a las cinco de la tarde seguía saliendo gasoil por la desembocadura del pequeño estuario hacia el mar. Lo puse en mi propio conocimiento y en el de otras de las autoridades competentes (SEPRONA, M.A.N. Lugo), para que se iniciaran los trámites correspondientes. De poco valieron las barreras que tarde se colocaron en el interior de la factoría una vez que el líquido tóxico pululaba libremente por las aguas. El resultado; una apreciable mancha olora en las aguas y una clara espantada general de aves.
Por si esto fuera poco, ahora nos toca un buque lleno de sustancias tóxicas enfrente a la isla Coelleira y que según últimas noticias pronto amarrará en el puerto de Celeiro.
En fin; parece que nunca estamos preparados para incidentes de esta índole y que ante la pasividad de las administraciones responsables en estas materias, quien lo acaba pagando siempre es el medio ambiente, aunque rapidamente se olvide en forma de compensaciones económicas, puestos de trabajo,... esperemos que de ésta vez la cosa no sea tan escandalosa a como nos tenían acostumbrados.
